sábado, 25 de febrero de 2012

¿Espejo?


Atrapada en un fascinante misterio.
En un mundo de sensaciones desconocidas
pero, un mundo de sensaciones incontrolables.
Un cosquilleo atemorizante y excitante.
En medio de dos voces: Sigue y Esto está mal.
Voces que escuchaba como susurros.
Susurros que no tenían poder sobre su cuerpo.
Sentía que se movía en cámara lenta pues,
el peso de sus emociones no le permitía dar más.
Cada gesto, proveniente de su semejante,
era una ráfaga de fuego que recorría su cuerpo.
Esa inquietante y adormecedora incertidumbre:
¿Dará un paso más?
Ése irrefrenable deseo de provocar el siguiente paso:
Un movimiento clave y, tal vez, de un paso más.
Una extraña atracción tan, aparentemente, mutua.
Cargada de culpa y deseo.
De quiero pero, no debo.
Con la conciencia a explotar por tanto pecado.
Y con el cuerpo húmedo de tanto deseo:
Dos manos se encontraron para recorrer dos cuerpos,
tan iguales entre sí, que parecían estar frente a un espejo.

2 comentarios:

  1. No sabes como he disfrutado de este domingo en compañía de tus letras, me has hecho recordar esas tardes interminables y deliciosas cuando estaba en el exilio. Por eso, por ésto, por todo... Te quiero y siempre me acuerdo de ti.

    ResponderEliminar
  2. Gabs, mi querida Gabs... Siempre te recuerdo, amiga. Gracias por leerme. Abrazos.

    ResponderEliminar